
Geraldine Bazán rompe el silencio ante los rumores en su contra porque supuestamente quiere impedir la boda de su ex pareja Gabriel Soto con Irina Baeva.
Gabriel Soto e Irina Baeva pronto van a casarse después de llevar una relación durante 4 años.
Hace poco se dio a conocer que el actor por más que quiera no podrá contraer matrimonio por la iglesia con su novia porque aún sigue casado con Geraldine Bazán.
La actriz supuestamente envió una carta al Vaticano pidiendo que no anularán su matrimonio con Gabriel Soto.
#GeraldineBazán responde a supuesta anulación de su boda que busca #GabrielSoto
— Noticia Informativa (@NoticiaInfoMx) August 7, 2021
A Geraldine parece no quitarle el sueño los rumores sobre las supuestas intenciones de su ex-esposo, Gabriel Soto, de anular su boda religiosa para poder casarse dentro de una iglesia con Irina Baeva pic.twitter.com/zzQrtbwfaz
La protagonista de «Alguien te mira» se casó por la iglesia con Soto en 2016 y luego de mantener una relación de 9 años y tener dos hijas al año siguiente se supo de varios rumores de infidelidad por parte del actor, lo que resultó ser cierta y por eso terminó ese matrimonio.
Según «El Borlote» en su canal de YouTube, dijo que la actriz de 38 años había solicitado en la sede central de la iglesia católica que no anularán su matrimonio con su ex pareja, con la finalidad de ser un impedimento en la boda de Gabriel Soto con Irina Baeva.
Después que salió esta información , Geraldine Bazán rompió el silencio y a través de sus redes sociales respondió por los cargos que hay en su contra y que afectan al padre de sus hijas.
La famosa compartió un pequeño comunicado en su Instagram donde desmintió el hecho de haber solicitado alguna petición a las autoridades eclesiásticas.

«Hay notas tan falsas, mentirosas y dolorosas que sólo alguien sin pensar puede crearlas, creerlas y peor aún difundirlas, fin del comunicado»
De esta manera la famosa actriz ha dejado claro que la noticia es totalmente falsa y no tiene nada que ver con que Gabriel Soto no haya podido hacer los trámites correspondientes para su nueva unión eclesiástica.